Las mascarillas faciales caseras son uno de los cuidados de belleza más naturales que podemos dar a nuestra piel. Sus efectos ayudan a la conservación de la piel en estado regenerativo, sobre todo cuando se reseca y agrieta, produciendo pliegues cutáneos en la cara (arrugas).
Existen diversas clases de mascarillas preparadas con distintos productos: lácteos y vegetales, frutas, frutos, aceites, huevos, miel, levaduras, harinas, arcilla, aceites, etc.
En este articulo te mostramos una receta de una mascarilla facial muy facil de preparar y es realmente fenomenal. Cualquier mujer preocupada por su apariencia que quiera preservar su belleza y juventud, es recomendable que comience a aplicar esta mascara.
Ingredientes:
Gelatina 1 paquete (10 g),
150 g Kaymak (leche, kéfir o yogur),
1 cucharadita de glicerina (farmacia o de hierbas),
1 cucharadita de miel.
El Kaymak es bueno para la cara con piel seca. Para piel normal es mejor usar leche o yogur, y para la piel grasa se recomienda el yogur bajo en grasa o el kéfir.
La gelatina, que es la encargada de planchar las líneas de expresión, suaviza y blanquea la piel y mejora la circulación sanguínea. También tiene un efecto positivo sobre el metabolismo de proteínas y amino ácido de la piel, ya que mejora su condición.
La glicerina Es un producto anti-envejecimiento ya que al ser capaz de mantener una correcta hidratación de la piel y un equilibrio perfecto en sus propiedades, provoca que la piel se conserve más joven y saludable.
La miel es un excelente antioxidante, un buen hidratante para la piel, un ingrediente que favorece la cicatrización y un antibiótico natural destacado que nos ayuda a eliminar las bacterias acumuladas. Todas estas características la convierten en un ingrediente perfecto para la elaboración de mascarillas faciales naturales.
Preparación:
– Disolver la gelatina en kaymak (u otro producto lácteo fermentado) y dejar en la nevera durante 6-8 horas.
Luego revolviendo suavemente, calentar la mezcla al vapor de agua, hasta que la gelatina se haya disuelto completamente. Retirar del fuego y añadir la miel y la glicerina y revuelva.
Uso:
La mascarilla preparada se puede refrigerar por 5 o7 días, y la debes utilizar todos los días. En la mañana se puede aplicar en frio a su rostro, para refrescar la cara, y por la noche un poco calentado (en el microondas o al vapor) para reforzar el efecto de nutrientes.
los efectos del uso de esta mascarilla casera serán visibles desde la primera aplicación.